Personal

Nota: Los textos tachados estaban en el original cuando inicé mi web en 1995 y los he tenido que corregir en esta revisión de mi web (2006) y ahora nuevamente (2015) (2016) (2019) (2020) Los años no pasan en balde.

(Modo Rollo on)

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• Se me ocurrió nacer en Santa Coloma de Gramenet («Santa Paloma de Grano Mano Limpio”, cuando se traduce del catalán al español. Qué cosas…). -desde que escribí la primera versión de este texto, le han cambiado el nombre a Gramenet– “Pueblecito” que cuenta en la actualidad con más de 100.000 habitantes y que esta colindante con la ciudad de Barcelona… Y como dice alguien que ha leído ésta página, curioso nombre el de GrameNET para una persona que esta metida en las redes hasta el ombligo.

Eso sucedió un 21 de enero

• Hacia arriba, mido 1,82 1,81 1,80 y gracias a mi masa de 110Kg 130Kg 144Kg 118Kg 135Kg 118Kg y, ya que gasto zapatos del 45, ejerzo una presión permanente, en dirección al centro de la Tierra, de alrededor de 5 kilos 6 kilos 5 kilos por centímetro cuadrado. Lo que resulta una fuerza considerable pero insuficiente a todas luces para compensar el achatamiento por los polos de nuestro planeta. Por consiguiente, y pese a mi mejor voluntad, nuestro mundo permanecerá como está aunque el diámetro de mi cintura muestra una obsesiva fijación en tender hacia infinito.

• Después de nacer y todas esas cosas que se suelen hacer en la infancia y la juventud (como pretender construir una bomba atómica a los cinco años -yendo al colmado de la esquina y pidiéndole al Sr. Antonio un par de kilos de uranio enriquecido-, etc.) y que no hay que repetir aquí ya que es experiencia común a todos nosotros, me encontré a los 18 años, aburrido de oír tonterías en mis clases de electrónica de la Escuela de Ingenieros Industriales de Barcelona y haciendo funcionar mi propio negocio de reparación de televisores, diseño y montaje de emisoras de radio y otras lindezas electrónicas.

• A los 22 cometí mi primer error laboral y me fui a trabajar por las tardes, aprovechando que las clases eran sólo por la mañana, a una empresa llamada Gispert, de reparador de las recentísimas calculadoras digitales electrónicas… que funcionaban con lamparitas de neón (anillos de Tyratrones: tecnología de estado gaseoso. Impresiona el nombre, ¿no?) y ningún chip: Intel todavía era la primera parte de la palabra “inteligencia” y Bill Gates aun era un beso y dos palabras de amor, o casi. Como mucho sería un rorro pidiendo teta (ahora pide -y consigue- otras cosas).

• Esas calculadoras trabajaban a la asombrosa (entonces) velocidad de 10 ciclos por segundo y tardaban un minuto en dividir uno entre tres. Eso si, no se equivocaban jamás, como algún Pentium actual de esos que funcionan a nosecuantos millones de ciclos por segundo.

• Al cabo de un año, fui ascendido a la categoría de jefe nacional de los laboratorios de mantenimiento de Gispert… Y ya acabé definitivamente con la Escuela de Ingenieros. Un poco más y ella acaba conmigo

Y como Gispert, en el ínterin, se hizo representante para España de una casa Holandesa llamada “Philips Electrologica NV” que fabricaba calculadoras electrónicas (¡con chips ya!) pues me tocó aprenderme como era una CPU por dentro (seguía sin inventarse eso del Intel y las CPUs, en lugar de un solo chip, estaban construidas con infinidad de placas llenas de circuitos integrados y transistores) y, como consecuencia, me encontré haciendo un par de viajes a la semana a un pueblecito de Holanda, llamado Eindhoven y, en ese pueblo, Philips tenía (tiene) su sede central. Curiosamente, en ese villorrio, todas las bombillas eran Philips, la ropa de confección llevaba la etiqueta Philips y (no exagero, palabra) hasta las tapas de los inodoros eran de la marca Philips.

• Creo que Philips por fin se ha centrado y ahora sólo se dedica a eso de las bombillas y cosas electrónicas, que es lo suyo.

• Bien, a lo que íbamos. En 1972 y tras tanto viaje y llegar a vivir casi permanentemente en un apartamento, de un edificio (propiedad de Philips, por supuesto) llamado Delta LLoyd, al final de la calle Stratumseind, en cuyos bajos y sótanos estaban parte de los laboratorios de desarrollo y diseño de los ordenadores Philips, decidí que ya estaba cansado de trabajar como asalariado, de viajar, de comer comida holandesa, de diseñar memorias de toros (nada que ver con los recuerdos de Jesulín de Ubrique, en serio) y era tiempo de volver a la libertad y a la tranquilidad de la vida del trabajador por cuenta propia.

• Así que despedí a Philips y a Gispert de mi vida y me puse nuevamente a trabajar por mi cuenta como consultor de electrónica digital.

• Me vi contratado por varias empresas y, por consiguiente, involucrado en una serie de proyectos la mar de divertidos:

El diseño de lo que sería la primera calculadora de bolsillo fabricada en España por una empresa de tocadiscos (¿alguien recuerda los tocatas “Cosmos, para mejor sonido”?). Cuando tuve diseñada la calculadora y preparado el proceso de producción, la empresa contratante abandonó el proyecto. Nunca me dijeron si por dificultades financieras o por consejo de los asesores de márketing que debieron pensar que eso de las calculadoras no tenía futuro (bueno, lo se, pero me lo callo, ¿vale?).

• Lo cierto es que esa empresa pagó religiosamente todos mis honorarios y, de rebote, adquirí una experiencia en ese tema que pude aplicar en la siguiente compañía que contrató mis servicios.

• Así, me vi un año viviendo en Vinaroz “sur la mer”, diseñando la calculadora que iba a fabricar una empresa electrónica llamada TRQ [Talleres Radioeléctricos Querol]. Esta empresa si que continuó hasta el final y, verdaderamente, inundó España de calculadoras de bolsillo y sobremesa. Seguro que alguno de vosotros recordaréis las calculadoras de TRQ, como el modelo “Laura” llamado así en honor de la hija del dueño de la fábrica, Sr. Querol, que falleció a la edad de tres años en un accidente de automóvil…

• Finalizado el proyecto y dejando la fábrica de Vinaroz vendiendo calculadoras, fui contratado por Aiscondel para poner en marcha una nueva fabrica de calculadoras en Cerdanyola, llamada MOESA [Máquinas de Oficina Electrónicas, S.A.].

Aquí se fabricó la calculadora de sobremesa Condata que también fue bastante vista por todas las oficinas de España…

• Y podría seguir detallando proyecto por proyecto, pero eso sería más aburrido que los telediarios del mes de agosto, así que dejo el tema y sigo hasta el presente a grandes rasgos. Si me he entretenido aquí es porque considero que se trató de una época valiente, divertida y que hizo historia en la electrónica avanzada de nuestro país…

• De proyecto en proyecto, llegamos a 1976, momento en que apareció el primer ordenador de Apple, fabricado por un par de chalados, Jobs y Wozniak y cuya posesión de una de las primeras unidades marcó un hito en mi vida y, creo, influyo totalmente en ella.

Apple consiguió que me fuese apartando de los proyectos de electrónica pura y me metiese más a fondo en temas relacionados con la aun en pañales informática personal.

El primero ordenador personal serio de la historia fue el Apple ][. Entro directamente en mi vida por dos razones:

La primera es que yo tenía ya un ordenador personal construido y diseñado por mi (en base a un procesador de cuatro bits SC/MP de la National) pero que no tenía ni punto de comparación con el Apple ][.

La segunda es que el Apple ][ venia con todos los esquemas y con notas manuscritas de su diseñador, Wozniak, un tío c*j*n*d* donde los haya. Conocí a Wozniak y a Jobs en persona y eran unos tíos increíbles. Bueno, Jobs un pelín “pesetero” cualquiera diría que era catalán, como yo.

• No obstante, y debido a que la Informática personal estaba en mantillas y no daba para comprar los garbanzos nuestros de cada día, seguí haciendo proyectos, tanto de electrónica como de software o ambos, aprovechando los recientes procesadores (Intel ya existía y fabricaba una CPU de cuatro bits, el 4004 y otra de ocho bits, el 8008). Bendito y divertido lenguaje assembler el de aquellas máquinas.

También acepté proyectos aburridísmos de software de gestión en ordenatas gordos, pero de pocas Ks, que no cabían en una habitación:

• Alguien recuerda las tarjetas perforadas de 80 columnas? ¿o las “modernísimas” (entonces) de 96 columnas del Sistema 36 de IBM? y ¿Que me decís del lenguaje RPG I?…

Repito, había que comer.

• Sin embargo, me vi involucrado también en divertidísimos proyectos de programación en assembler como el firmware de las máquinas de contar monedas que usan (todavía) los bancos…

• En 1978 puse en marcha el primer club de usuarios de ordenadores personales de España. Estaba dedicado a los propietarios del Apple ][, el Pet de Commodore y el TRS-80 de Radio Shack.

• El Club llegó a tener la “friolera” de 100 socios, lo que no estaba mal para aquella época. Yo casi juraría que esas cien personas eran todas las que en España tenían un ordenador personal grin

• El club se llamó “Data” pero, por razones de marcas registradas, enseguida cambió su nombre al de “Run”.

Editaba un boletín mensual y yo me dedicaba a viajar, sobre todo a Londres, a adquirir licencias de distribución de programas que luego, y tras traducirlos al Español, vendía a través del club. Ello me permitió vivir bastante cómodamente durante un par de años.

• Pero el ser humano es inquieto y el placentero transcurrir de los días reuniendo maniacos del ordenador y consiguiéndoles software no iba con esa inquietud, así que embarqué aun socio de pesetas (luego se demostró que no tenía tantas) y montamos la primera tienda de ordenadores personales de España. Se llamaba Isecom, S.A. y vendíamos productos de la, hoy extinta, Ohio Scientific. Ni que decir tiene que dichos productos eran ordenadores personales de todos los tamaños concebibles en aquellos días.

No comercializamos Apple, que era mi deseo, ya que al socio no le gustaba el ordenador.

Fue un error, en un par de años, Ohio Scientific cerró y con ellos, Isecom…

• Cabe la satisfacción de haber inundado España de unos pequeños ordenadores (Superboard) que se vendían sin carcasa y muchísimo más potentes que los entonces incipientes ZX y Spectrum de Sinclair . Al menos, la Superboard, costaban las mismas pesetas y tenían un teclado de verdad…. Y el primer Microsoft Basic que Guillermo Puertas diseñó para Ohio Scientific. Su primer trabajo bien pagado.

También instalamos cantidad de máquinas de gama alta para gestión de empresas y, naturalmente, me tocó analizar, programar, teclear, etc.

Precisamente lo que no me gustaba.

• Simultáneamente, inicié la puesta en marcha de una empresa de software [FastWare Inc.] en en USA. Compañía que me dio sus buenos dividendos y que me ayudaron a vivir junto con las perrillas (pocas) que obtenía de Isecom. Fastware fue toda una experiencia increíble sobre la eficiencia de USA. Me costó tres días y cien dólares poner en marcha la compañía. Incluida una exención fiscal por dos años y alguna anécdota curiosa como la de que el día que me dieron la licencia de apertura del negocio (a la mañana siguiente de solicitarla), no había lineas disponibles de teléfono en el local que había alquilado y la Bell me dijo que me “ponían una extensión del vecino durante los dos días que tardaría en tener mi línea y que, mientras, ni el vecino no yo pagaríamos las llamadas fuesen donde fuesen del Planeta Tierra”

…Igualico que en España.

• Mientras, el club Run, y debido a mi dedicación full time a Isecom y Fastware (y también a desacuerdos con el socio que veía al club como una competencia para Isecom) fue languideciendo.

• Y también languideció Isecom de la mano de Ohio Scientific y de la falta de financiación para cambiar de representada (Yo quería Apple, claro… pero no habían pelas; el socio salió un poco bluff).

• En este momento tuve que andar más por España ya que los problemas financieros de Isecom eran más que preocupantes y dejé a Fastware Inc. en manos de un amigo americano, David Carvey.

• Entonces, se produjo un hito muy importante en mi vida: en 1982 conocí a Angeles quien ha sido, desde un mes después de conocerla, mi mujer, mi secretaria, mi ayudante y quien me ha dado ánimos para tirar adelante en los momentos más difíciles. Y así sigue siendo hasta el presente.

• De modo que no esperé a que Isecom cerrase (lo hizo unos meses más tarde) y, tras intentar recuperar mi participación en la empresa, la dejé y monté una casa de software animado por el éxito de fastware en USA. Y cometí otro error, cerrar Fastware Inc. pensando que el tema del software seria tan rentable en España como lo fue en USA.

• La casa de software se llamó “Nanosoft” como iniciación de que era más pequeña que la entonces incipiente Microsoft (pero no demasiadogrin

Nanosoft duró bastante tiempo y llegó a tener a 18 programadores en nómina… Hacíamos aplicaciones estándar y teníamos clientes como Xerox, Sanyo Microinformática, Apple (Gecosa, entonces) e infinidad más pequeños.

• Y un día acepté a un nuevo socio con el fin de convertir a Nanosoft en “Megasoft”… Contratamos más personal y todo fue bien, hasta que, de pronto, al socio no le marcharon demasiado bien las cosas en sus negocios de la construcción y su aportación financiera se fue al garete mucho antes de ser completada. El trato era ir aportando su parte del capital en varios plazos a lo largo de un año y medio pero a los ocho meses dejó de hacerlo. Así que que me quedé con una nómina de personal inmensa y sin posibilidades de soportar semejante gasto hasta que esa empresa fuera nuevamente rentable ya que habíamos previsto un período de pérdidas de dos años…

• De modo que cerrojazo y de nuevo a trabajar como free lance y con el juramento serio de que nunca jamás me asociaría con nadie.

• Me dediqué a la consultoría informática y de pionero despistado, como siempre, monté un sistema de comunicaciones -BBS- con el que dar soporte a mis clientes y entretenimiento a quien quisera acceder. Aquí lo podeis ver en una versión de 1986 y ya con Mac en substitución del anterior Apple ][. Lo siento, no tengo fotos anteriores

• No me costaba gran cosa convencer a mis clientes de que se gastasen una millonada en ordenadores pero no había manera de que entendiesen que era eso del módem.

Aún así, unos cuantos aceptaron usar el módem para estar en contacto conmigo. Y alguno de ellos aun permanece tras catorce veinticuatro años por los que han pasado de conectarse a mi BBS de soporte desde 300 bps de entonces, a los 128.000 bps de la RDSI de hoy y usando Internet, Infovía y Frame Relay 8 mega bps de hoy mediante ADSL y circuitos privados virtuales.

• En enero de 1984 nació el Macintosh y yo tuve la suerte de ser el afortunado poseedor de un Mac con el numero de serie 14 de los primeritos que salieron al público de verdad. (hubo una priemera serie destinada a empleados y personalidades)

• Como uno de mis trabajos (y de Angeles) era el de traductor de aplicaciones, pudimos usar ese Mac en dicha tarea. Así, con un Mac se tradujeron la mayor parte de los programas y manuales de algunas aplicaciones estrella de aquella época para PCs (SemiPCs: MS/DOS 1.0) y máquinas CP/M: el WordStar, el CalcStar, el FileStar… y todos los “Star” de Micropro International. Por cierto, el “Isostar” no tiene nada que ver con Micropro y ni tan siquiera con la informática .-)

• Cuando cerró Micropro y sus productos fueron vendidos a otras compañías de software, algunas de ellas hicieron su propia adaptación de los programas y nuevas traducciones en las que no intervenimos ni Angeles no yo. Por ello, es posible que si estás usando el veterano WordStar en español (sé de muchos algunos que aún lo utilizan), esa versión no haya pasado por nuestras manos.

• En 1987 me llamaron de Edica (Editorial Católica, la editora episcopal del periódico Ya y otros) para escribir un programa de comunicaciones que permitiese usar el Mac como terminal de sus ordenadores Itek. Un Mac, a pesar de su precio de entonces, era muchísimo más barato que una terminal “tonta” de Itek.

Tuve que pelearme con cosas rarísimas como los protocolos “isócronos” que usaban los Iteks, pero el programa salió y esa fue mi entrada en el mundo de la prensa.

• El periódico Hoy de Badajoz pertenecía a Edica y me llamaron para ver si era posible montar un periódico con Mac.

• No es que el Mac fuese convincente en aquellos tiempos para sus aplicaciones en prensa. Se trataba que Edica andaba muy mal de dinero y, como era necesario renovar el sistema de fotocomposición del Hoy, lo más barato, de lejos, era hacerlo con Mac.

Y me vi metido en un proyecto que nadie daba un duro por su éxito: montar todo el sistema redaccional y de fotocomposición con Macintosh.

• En navidades de 1987 ya estaban saliendo galeradas del Hoy hechas con Mac y, un año más tarde, ya se hacia todo el periódico a página completa con Macintosh aunque con las fotos montadas en mesa ya que aún no habían escanners eficientes y la calidad que podía dar el Mac en fotografía estaba por debajo de lo requerido.

Pero tras un año más, por fin se montó todo el periódico de»pe a pa” con Macintosh.

De hecho, el Hoy fue elprimer periódico grande de España que se hizo con Macintosh.

• Hubieron un par más que se me adelantaron unos meses, como el Diario de Reus, una publicación semanal que se hacía con cuatro macs y una láser y el Día deZaragoza…

Pero nada que ver con una red importante, con más de cincuenta macs interconectados por Appletalk y un par de filmadoras de Monotype (Blaser) que ni siquiera hablaban Postscript.

Como consecuencia del montaje del Hoy, fui conocido en el mundillo de la prensa y comencé a asesorar a otros periódicos que se pasaron a Mac:

• Diseñé la red del extinto Sol de Madrid (Como anécdota, el diseño inicial se hizo en la cafetería Río de Badajoz sobre servilletas de papel hasta que nos echaron a las tantas de la madrugada y sin dejar ni una servilleta sin emborronar en toda la cafetería), la del Sport de Barcelona, La de Informacions Diari de Andorra, Prensa de Ibiza, etc… Y así seguí trabajando en asesoramiento y establecimiento de comunicaciones en periódicos como La Verdad de Murcia, el Ideal de Granada, el Sur de Málaga, el Norte de Castilla, el Comercio de Gijón, el Correo de Bilbao, el Diario Vasco de San Sebastían, El Deia de Bilbao, el Diario Nueva Rioja, el diario Montañés de Cantabria, el extinto Observador de Barcelona… y más que no recuerdo en este momento.

• Bien, hoy en día, prácticamente todos los periódicos se confeccionan con Macintosh, así que estoy muy orgulloso de haber acertado al montar el Hoy en 1987…

• Y no todo fueron periódicos. Recuerdo con cariño proyectos como la red de comunicaciones meteorológicas, vía satélite y modem, que organizamos para la Diputación Foral de Alava y con Mac, naturalmente…

• Mi sistema de comunicaciones de atención a clientes continuó creciendo, se llamaba “SoloMac” y, en 1992 decidí abrirlo al público y conectarlo a Internet para ofrecer correo electrónico mundial a mis usuarios.

SoloMac fue creciendo en usuarios hasta llegar a unos seiscientos.

• Desde hace tiempo, he tenido la costumbre de reunir periódicamente a mis usuarios y clientes en encuentros informales y, sobre todo, gastronómicos. Pues bien, fue en una de esas reuniones, concretamente la de primavera de 1993, cuando se me acercó una persona y me dijo “Alberto, esto que tienes puede ser muy importante si le damos el impulso de márketing adecuado; yo tengo una empresa de publicidad, ¿que te parece si le damos marcha y de ser un sistema con 600 usuarios lo convertimos en un inmenso negocio de 100.000?”

La persona era Eudald Domenech y, si bien yo no tenía gana alguna de que SoloMac se convirtiese en un “negocio inmenso”, si me atraía la idea de fomentar el uso de las comunicaciones así que acepté el reto.

Y nació Servicom. Servicom fue una gran inversión en publicidad y una menos importante en recursos técnicos. Hasta el primero de Agosto de 1994, el centro de comunicaciones de Servicom estuvo en mi despacho particular de Taradell, pueblo situado cerca de Vic, en la provincia de Barcelona.

• Resultó que para agosto de 1994 yo ya me había convencido de que el camino emprendido por Servicom era divergente de mis ideas sobre las comunicaciones y, sobre todo, siendo yo una persona con un espíritu eminentemente técnico, no encajaba con un sistema en el que todos los recursos se dedicaban a la promoción comercial anunciando características que en aquellos momentos los ordenadores de que disponíamos no podían cumplir y sin presupuesto para adquirir nuevo material.

De modo que decidí apartarme del proyecto Servicom y reanudar lo que había sido SoloMac un par de años antes.

• Como el nombre SoloMac lo había cedido a Servicom, monté el sistema con el nombre Seker (ahora Primus), que en mitología egipcia es el nombre de Osiris resucitado (como lo del Ave Fénix pero en egipcio).

Y mi desconexión de Servicom fue total, de todas maneras nunca había habido más que un contrato de colaboraciónentre ambas empresas y cada una podía muy bien seguir por su camino en cualquier momento y sin interferir a la otra. Bueno, la verdad es que hay todavía un contrato con una cosilla pendiente y que nunca he reclamado a Servicom dada su precaria situación económica de aquellos tiempos. Tal vez algún día desempolve esos documentos Pero no pasa nada ya que hoy en día, las relaciones con la persona que iniciamos Servicom, Eudald Domenech, han vuelto a ser excelentes y más vale una buena amistad que cualquier otra cosa que la pueda empañar…

• Por cierto, que la resolución del contrato me obligaba a mi a no utilizar el Software FirstClass con el que estaba montado el BBS de Servicom. Por supuesto que fui muy consciente (y contento) al firmar esa limitación y nunca me he arrepentido de ello. Seker usa en el BBS el software Telefinder que no es “el terror de los administradores de sistemas” que es FirstClass. O sea que cuando Servicom pensaba que estaba obteniendo una ventaja al no permitirme hacerle la competencia con ese software, yo estaba más que contento de que ellos creyesen que estaban dificultando mi futuro en cuanto a la posibilidad de hacerles la competencia. Pero más sabe el diablo por viejo que por diablo grin

• Dicen que a la tercera va la vencida y en julio de 1995 acepté la entrada de un socio en Seker, Ramón Anfruns, un chaval de 25 años que recién ha terminado su carrera sus estudios de informático en USA (en una escuela de aviación llamada avi8r, curioso lo de los yankees con los sitios donde enseñan informática) y que en diversas ocasiones, aprovechando sus vacaciones en España, estuvo ayudando en Servicom y Seker en régimen de prácticas.

• Seker se convirtió en Seker BBS, S.A. y así continuó con dos socios al 50%, Ramón y yo mismo hasta enero de 1997 momento en que entraron once socios más.

• En las empresas para como en el amor (si no se es mormón) : más de dos son una multitud. Así que decidí apartarme de la multitud de cabezas pensantes y un maquiavelo, que componían Seker y dejé la empresa en sus manos.

Ya recordaréis aquel refrán que dice que “un dromedario es un caballo diseñado por un comité”.

Y como yo no soy hombre de desierto, decidí abandonar la fabricación de dromedarios.

Un año más tarde, Seker se vendió por cuatrocientos millones de pesetas a Primus Tel. En ese momento las acciones de Primus estaban a 130 dólares y, como es de esperar, Primus pagó la adquisición en acciones. Bueno, y unos millones en efectivo, no muchos, a cada socio.

Cuando los socios pudieron realizar las acciones, dos años más tarde según contrato, esas acciones estaban a cincuenta centavos

O sea que no me perdí gran cosa al marchar de aquella jaula de grillos. Y el instigador de que yo me marchase (en todas partes hay un maquiavelo) para conseguir ser presidente de la empresa, fue cesado del cargo por el Consejo de Adminsitración y perdió todas sus acciones unos meses después a su valor nominal, 3.000 euros -500.000 pelas de entonces-. O sea que no obtuvo beneficio alguno en la venta de la empresa a Primus Tel. Eso confirma que, siempre, el que la hace la paga wink

• De modo que continuo con mi trabajo como consultor diseñando redes, sistemas de comunicación, intranets, aconsejando sobre la mejor adquisición… etc. En cualquier caso, un trabajo muy divertido y variado.

(Modo Rollo off)

5 comentarios en «Personal»

  1. Pues a mi me ha encantado leer tu historia. He estado buscando info de ti a raíz de leer algo de ti tras ir rebotando de lado a lado, iniciando la búsqueda de algún artículo de Lester The Teacher. Y no me levanto pronto. Son las 8:10 y aún no me he ido a dormir. Es como esa encuesta de «como de geek eres» en la que una de las preguntas que te hacen es «que hora es». Un saludo. Realmente apasionante tu historia, me creas o no.

  2. Por cierto hay una APP para iOS (ignoro si también para Android) que se llama «Trueweight» -0,99 € en la AppStore- y que muestra el peso real descontando las variaciones diarias debidas a la perdida o adquisición de líquidos.

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